miércoles, 25 de enero de 2012

CAPÍTULO 15: Gravitas

Domingo 26-03-11 10:30 a.m.


 Esta es una noche que voy a recordar siempre. Estás muy linda (como siempre, como hace diez años) Te mando un beso grande. Cuidate mucho Polaco.

El mensaje latía en la pantallita del celular. El olor que dejó el paso del tren la envolvió por completo. Piedra quemada en una mezcla de óxido y tierra. El mismo tren que la dejaba a pasos de la casa de él. El mismo tren que la devolvía a hace diez años. Se conmovió un instante... y cruzó el paso a nivel apretando en el fondo del bolsillo de la campera el celular que guardaba esa dulce dedicatoria de un presente confuso.
Todavía se olía en el cuerpo el perfume que él le había dejado de la noche anterior. Había decidido no lavar aquel aroma de presente-pasado que la satisfacía.
Ella había sido su profesora de idioma una década atrás. Cuando ambos eran inmortales, cuando se permitían equivocarse a propósito aduciendo errores por la edad, por la inexperiencia, por la falta de mundo, por falta de vivido, por ser inmortales.
Tocó el timbre de la farmacia de turno con firmeza, esperó impaciente a que alguien la atendiera hasta que por fin un joven, de pulcro ambo blanco, le preguntó en qué podía ayudarla desde una ventanita detrás de la persiana verde. La pregunta la sobresaltó pero en seguida contestó:

   Buen día. Necesito la píldora del día después de una sola dosis, por favor —dijo acercándose más al hueco de la vidriera para que solo el joven pudiese oírla, ya tenía dos personas esperando detrás de ella.

   Muy bien —dijo el muchacho y fue directo hacia la computadora que tenía sobre el mostrador.

   ¿Algo más? —Agregó servicial alzando la voz

   No, solo eso. ¿Cuánto es? —y se metió la mano en el bolsillo trasero del jean.

   Son treinta y cinco pesos —respondió el joven desapareciendo detrás de una gran vitrina repleta de medicamentos.

En cuanto llegó a la casa tomó la píldora y sintió por fin el alivio de hacer las cosas bien. No debía correr ningún riesgo. Desde que le había quitado el pecho a su chiquito era que le rondaba la idea de volver a quedar embarazada. A pesar de cierta reticencia por parte de su marido ella había abandonado los cuidados anticonceptivos para agrandar la familia. No había estado en sus planes que llegaría el día en que iría a estar con otro hombre que no fuera el padre de su hijo. ¡Jamás lo imaginó! o siendo honesta consigo misma... por lo menos no tan inesperadamente. Por ahora lo único que le daba algo de tranquilidad era tomar esa precaución después de la cita de la noche anterior.
A los pocos días de la píldora tuvo la grata novedad de no estar embarazada.
Ahora le surgía la gran disyuntiva si comenzar a tomar anticonceptivos o no a partir del esperado reencuentro con su ex ¡luego de 10 años!
Hizo una cita con una ginecóloga para que le recetara las pastillas anticonceptivas pero al hacerse una serie de estudios hormonales le detectaron unos valores alterados en los resultados por lo que no era aconsejable la prescripción de píldoras; solo podía cuidarse con preservativos en caso de acostarse nuevamente con su ex.
Pensó que no le caería en gracia cuando se lo contara ya que a él le gustaba sentirla plenamente con todo su ser. Hubo un encuentro más a los quince días de aquella primera vez, luego otra más y otra más. Pasaron algunos meses y había tenido que planificar esos encuentros de tal forma en que él no estuviese obligado a cuidarse, por lo menos como una medida un poco menos riesgosa que en días fértiles. El riesgo era muy alto y había asumido correrlo...enfrentando lo que ocurriese.

Octubre 2011


   ¡Hola!

   ¡Hola polaquito!

   ¿Cómo estás? Tengo que decirte algo...

   Bien, ¿qué cosa? ¿Estás bien?

   Sí, bah, no... tengo un retraso de siete días...

   ¿Y? ¿Yo qué tengo que ver?

   Mirá, en caso de estar embarazada existe una probabilidad muy alta de que sea tuyo...

   ¿Vos no te cuidabas? ¡Recién me entero!

   Tengo una explicación para esto.

   ¿Cuál? ¿Cuál puede llegar a ser la explicación para acostarte con otro tipo que no es tu marido y no tomar las precauciones para evitar un embarazo no deseado? ¿Cuál? TE LEO.

   Mirá, sé que es difícil de entender pero no puedo tomar anticonceptivos porque estoy atravesando por una revolución hormonal y las pastillas empeorarían el cuadro... Me hice unos estudios hace unos meses y por eso especulé con ciertas fechas para no quedar embarazada de vos, pero ¡claro! Nunca te conté esto...

   ¿Me estás tomando por boludo???? No, no quiero más mentiras, ¡Polaco! ¿Me querés hacer creer que estás embarazada de un hijo mío? Llegaste al colmo de las mentiras, estás enferma pero no de hormonas, ¡estás mal de la cabeza!

   Pero esperá, no está confirmado de que ¡esté embarazada! Tengo un retraso de siete días, puede venirme en cualquier momento pero como soy un relojito en este tema, bueno, me empecé a preocupar. Si en dos días más no me viene voy a la ginecóloga.

   Si estás embarazada ¿qué vas a hacer? ¿Vas a abortar? ¿Te vas a sacar el problema de encima? ¿Me lo vas a decir? ¿Qué mierda vas a hacer con mi hijo?

   Pará!!! Hace un segundo era una mentira y ahora ¿¿¿es tu hijo??? ¿Qué te pasa? ¡Decidite! Si estoy embarazada no te vas a enterar nunca, porque hasta acá me vas a humillar. Olvidate de mí, olvidate de todo y hacete el favor de ¡¡no buscarme más!!

   De verdad que me duele en el alma que me trates así, no me lo merezco. Encima de que estoy pasando por la peor semana de mi vida ahora ¿también tengo que soportar que me humilles así?

   Das lástima, andá a que te duela en el alma con otro amante a quien atraer con un atraso inventado.

   ¡¡¡¡No te voy a permitir que me hables así!!!! Tengo un atraso de hoy una semana.

   Ya sé, ahora te desconectás.

   ¿Quién te creés que sos? No, no me voy a desconectar, no huyo más de vos.

   Sé que no soy lo que vos querés que sea, un boludo más en tu vida.

   Si querés desaparecer, hacélo. Es tu vida. Siempre fue tu vida. No sos ni fuiste un boludo más  y lo sabés. Yo no te fui a buscar, nunca te hubiera ido a buscar por temor a este desprecio.  ¡¡¡No me equivoqué!!! ¿Apareciste para humillarme? Date por satisfecho entonces.

   Claro... y venirme con esa historia del atraso es psicopático. Es tan enfermo... nos vemos y aparecés ahora con un atraso porque ¡Te olvidaste de tomar anticonceptivos! ... ¿¿tenés o creés que yo tengo 19 años??

   Pensá lo que quieras.

   ¡Obvio! Es mi esencia.

   Me cansaste. No tendrías que haber aparecido. Volviste para joder.No me busques más. Hacete el favor. Olvidate de todo.

   Me alegro. Ahora sí. No nos vemos ni nos comunicamos ¡¡¡NUNCA MÁS!!! Hoy se termina todo. No puedo escuchar un "te quiero" de alguien que me quiere endosar un hijo imaginario y me habla de herencias compartidas, y de tener algo mío que nunca voy a conocer.

   ¿¿¿¿Herencias compartidas????

   ¡Vos estás mal! No sé qué te pasa. No te conozco. ¿Hijo imaginario?

   Sí, no nos conocemos, Polaco.

   No sé si estoy embarazada o no pero que te quede bien claro algo: No quiero NADA de vos. Ni un peso, nada de nada tuyo. Yo no soy como las otras mujeres con quien habrás andado.Nunca me interesó la plata, si no fijate ¡cómo vivo! tengo el mismo auto de siempre, mi primer auto desde hace ¡una década! Si fuese interesada estaría con un tipo con guita y viviría en un caserón, sin embargo vivo en una casa modesta porque la plata no me moviliza, y mucho menos ¡la tuya! ¡Te podés cagar en tu guita! Te podés ir bien a la mierda y no me busques, por favor, nunca más me busques.

   Tu pedido es una bendición.

   ¡Adiós! Ahora sí me quedo tranquila. Si estoy embarazada de mi hijo me ocupo yo.

   Si es mío, es asunto mío.

   No lo vas a saber nunca.

   Estoy a cinco estaciones de tren de tu casa, puedo llegar en nueve meses y averiguar si tuviste familia o no. Del resto me encargaré yo.

   Si es imaginario... ¿Cómo lo vas a saber? Si aborto... ¿Cómo lo vas a saber? Si me mudo... ¿Cómo lo vas a saber? Si me muero en el parto... ¿Cómo lo vas a saber?

   Todo se sabe. Te encontré después ¡de 10 años!

   Me encontraste porque quise que me encontraras. Muy distinto será cuando quiera ser invisible, y soy capaz de desaparecer por completo para vos.

   Bueno, espero que te mejores.

   Me voy a ocupar de saber si todo es una locura (lo más probable) o puede ser cierto.

   No pensarás que una duda alcance para desentenderme, ¿no?

   Fuera de eso, listo. Adiós. Y esta vez no hay vuelta.

   Me gustaría saber con qué cara me vas a mirar cuando te des cuenta de que jamás te mentí.

   Con la misma que te miré en cada mentira que me dijiste.

   No sé por qué insistís con las mentiras... pero bueno, será parte de tus rollos para no comprometerte con nadie. Es una buena excusa eso de las mentiras. Te funciona a la perfección. Ojalá vos te recuperes, ya bastante difícil debe ser para vos soportarte día a día. Nunca antes me habías dado lástima, ahora sí la siento por vos.Estás muy enfermo...

   Ojalá encuentres alguien con quien relacionarte sexualmente, ya que no parece ser tu marido el partenaire adecuado. Yo, nunca más. A otro con tu enfermedad.

   Sí, tenés razón en todo... (Hay que seguirte la corriente)

   No, o sí. Me importa poco.

   Volvete a la cueva, de donde no debiste salir jamás.

   Me voy a desconectar para siempre. Y esta vez es para siempre. Es cuestión de preservación.

   Por mí, hacé lo que quieras. Huís. Está bien. Es lo que mejor te sale.

   ¡OK! Adiós.

Y se desconectaron furiosos los dos, ignorantes del sudor y taquicardia que ambos sentían en las entrañas, en el pecho, en el cuerpo, en el corazón.
Ella se encerró en el baño a llorar con las tres pruebas de embarazo que habían dado negativo aferradas en un puño.
Él se recostó en la cama mirando el cielorraso deseando despertar de aquella pesadilla.
Todo lo que siempre habían temido estaba amenazando con voltearles la vida que se habían construido con tanto esmero, en cualquier momento o en nueve meses.


 

domingo, 15 de enero de 2012

Canción de encantamiento de la película Rapunzel de Disney- Healing song from Disney's movie Tangled.



Flor que da fulgor (Latinoamérica)
Flor que da fulgor,
Con tu brillo fiel,
Vuelve el tiempo atrás,
Volviendo a lo que fue.
Quita enfermedad,
Y el destino cruel,
Trae lo que perdí,
Volviendo a lo que fue.
A lo que fue...

Brilla linda flor (España)
Brilla linda flor,
dame tu poder
Vuelve el tiempo atrás,
torna lo que ya fue.
Cura el daño ya,
cambia el azar.
El sino trócalo,
torna lo que ya fue
Lo que ya fue...

Flower, gleam and glow (English)Flower, gleam and glow
Let your power shine
Make the clock reverse
Bring back what once was mine.
Heal what has been hurt
Change the Fates' design
Save what has been lost
Bring back what once was mine
What once was mine...

Read more: http://elguardiandelibros.blogspot.com/2011/02/miercoles-musicales-16.html#ixzz1jYj9negs 
Under Creative Commons License: Attribution Non-Commercial No Derivatives

miércoles, 11 de enero de 2012

If you forget me - Pablo Neruda's poem in Madonna's voice

If You Forget Me



I want you to know one thing
You know how this is

If I look at the crystal moon
At the red branch of the slow autumn at my window
If I touch near the fire the impalpable ash 
Or the wrinkled body of the log
Everything carries me to you
As if everything that exists - aromas , light , metals
Were little boats that sail toward those isles of yours that wait for me

Well , now
If little by little you stop loving me
I shall stop loving you
Little by little
If suddenly you forget me
Do not look for me
For I shall already have forgotten you

If you think it long and mad the wind of banners that passes through my life
And you decide to leave me at the shore of the heart where I have roots
Remember
That on that day , at that hour , I shall lift my arms
And my roots will set off to seek another land

But if each day , each hour , you feel that you are destined for me
With implacable sweetness
If each day a flower climbs up to your lips to seek me
Ahh my love , ahh my own , in me all that fire is repeated
In me nothing is extinguished or forgotten
My love feeds on your love , beloved
And as long as you live , it will be in your arms without leav
ing mine

domingo, 8 de enero de 2012

CAPÍTULO 14: Frente a frente. 3° parte.



Alrededor de las 4 am, ella decidió que ya era hora de irse a casa. Terminó su trago y fue al baño. Él permanecía recostado en la cama desnudo boca abajo abrazando la almohada adormecido.
Se miró en el gran espejo del baño y se vio las marcas en el cuerpo de haber pasado una noche de pasión. Supuso que a la hora de regresar a su casa, tanto su marido como su pequeño estarían profundamente dormidos y se despreocupó por un momento del asunto.

   Me tengo que ir —dijo enseguida que cerró la puerta del baño que daba frente a la cama donde descansaba él.

   ¿Ya? —preguntó él buscando con los ojos algún sitio dónde descubrir la hora.

   Sí, ¡ya! Son casi las 4 y media...

   Bueno —contestó él con desgano mientras buscaba su ropa —me gustaría que te quedaras a desayunar —le dijo mientras se ponía el calzoncillo.

   A mí también me gustaría pero no puedo...—le respondió ella mientras se abrochaba las hebillas de los zapatos de plataforma. Se terminaron de vestir y se quedaron de pie uno de cada lado de la cama. Se miraron cómplices y se acercaron para darse un beso tierno que concluyó siendo otro momento alocado de besos y caricias por debajo de la ropa.

   ¡Me volvés loco! —Le dijo mientras le tomaba la mano y se la metía por dentro del jean — ¿te das cuenta cómo me ponés? —la hizo que tomara al miembro con fuerza. —Sí, me doy cuenta como te enloquecés y me encanta —afirmó ella mientras le acariciaba con firmeza todo el pene erecto dentro del boxer y él la besaba profundamente.

   ¿Cuándo te puedo volver a ver? —le susurró él en el oído como si no quisiera que nadie más que ella pudiera oírlo.


   No sé. No me quiero ir, me tengo que ir, y no sé qué pasará de ahora en más —lamentó ella en pocas palabras.

Se despidieron con más besos calientes en la cama, ahora ya vestidos, hasta que tomaron la firme decisión de despedirse de una buena vez.
Ya en el living ella se puso su camperita de jean, tomó su cartera, las llaves del auto y se paró junto a la puerta de salida que daba al ascensor.

   Parecés un perrito con la correa en la boca esperando que el dueño lo saque a hacer sus necesidades en la calle —bromeó él tomando las llaves de su casa.

   ¿Traés la bolsita para juntar mi caquita? —se rió ella siguiéndole el chiste.

   No, te la junto con la mano —dijo él con cara de burla.

   ¡Ya tuvo que derrapar! —largó una carcajada profunda.

   Me encanta cómo te reís... —le dijo abrazándola en el umbral de la puerta hacia el ascensor.

   A mí me encantás vos por completo —dijo ella abrazándolo por la cintura.


Llamaron al ascensor y bajaron los dos pisos besándose como si nunca antes lo hubieran hecho.
Llegaron al hall de salida y tomaron una distancia prudencial para no despertar ninguna sospecha de los posibles testigos de la escena, a pesar de la hora y que no había nadie en la calle que pudiera descubrirlos in fraganti.
Le abrió la puerta y se dieron un beso distante en la mejilla.

   ¡Chau! —dijo ella.

   ¡Chau, Polaco! —le contestó él y cerró la puerta de vidrio de la calle.


Una vez camino a casa ella recibió un mensaje de texto inesperado que rezaba:

Esta es una noche que voy a recordar siempre.
Estás muy linda
(como siempre,
como hace diez años)
Te mando un beso grande.
Cuidate mucho Polaco.

jueves, 5 de enero de 2012

CAPÍTULO 14: Frente a frente. 2° parte.




En silencio, desnudos en la cama, se recorrieron los cuerpos con las manos, las bocas y los ojos. Hasta que él habló más allá del recuerdo y de las palabras, habló desde el corazón, desde su corazón presente: — No sabía que te había extrañado tanto hasta ahora que te tengo en mis brazos... nuevamente.
Ella lo miró con los ojos nublados de afecto y le besó los labios despacio.

   Fue maravilloso, es maravilloso. Es increíble. Tenía miedo de este momento, de no ser nosotros como lo éramos, pero increíblemente tenemos la misma química que hace un siglo. Seguimos siendo nosotros, tenemos la misma piel, y la misma química, la misma atracción física que antes —agregó ella abrazada a él y perdida en el verde de esos ojos que la fascinaban tanto.

   O mejor que antes. Creciste mucho, Polaco. Se te nota hasta en la cama. Ya no sos aquélla nena, ahora se te nota la madurez en el cuerpo. Me gustás, me gustás más que antes, Polaco —dijo y la besó con besos atrasados, con aquellos besos que le debía desde hacía tantos años, con besos llenos, besos de siempre, besos soñados y la volvió a amar, incansablemente. Comenzaron todo de nuevo, desde cero, se besaron apretadamente, se enlazaron fuertemente deseando fundirse en ese abrazo caliente y mojado. Se dijeron cuánto se habían pensado desde el primer contacto luego de diez años de distancia. Se acariciaron, se lamieron, se saborearon para re descubrirse mayores, más adultos, más asentados, más definidos. Se recorrieron una y otra vez, se desearon una y otra vez, se amaron una y otra vez. Al cabo de un par de horas, extasiados aún por la emoción del reencuentro tan ansiado se recostaron en la cama. Él renovó los tragos y los llevó a la habitación, encendió el equipo de audio del cuarto y se prestaron a conversar.

   Polaco, nobleza obliga y te debo pedir disculpas por haberte gritado hace como diez años y haberte llamado loca y enferma. Me arrepiento profundamente de haber sido tan necio y no haberme dado cuenta de que tenías razón... —dijo él de corrido y mirándola fijo a los ojos solemnemente.

   ¿De qué hablás? —preguntó ella mientras bebía su gin tonic helado.

   De que tenías razón cuando sospechabas un interés oculto de mi cuñada por mí. Seis años después de tu comentario, mi cuñada me avanzó, pero me avanzó mal y desde hace algún tiempo que no le hablo. Es una situación de mierda pero debía decirte que tenías razón en todo, todo, todo lo que sospechabas.

   ¿Cogieron? —lo increpó sin dejar de mirarlo a los ojos.

   ¡No! Nunca tuve nada con ella ni lo tendría jamás. Por muchas razones pero la más importante es que nunca lo cagaría a mi hermano, y segundo que la tipa me parece muy desagradable —concluyó él acomodando mejor la almohada contra el respaldo de la cama.

   Pensé que te resultaba atractiva físicamente. Es muy atractiva tu cuñada, o por lo menos lo era hace una década. Alta, flaca, pelo largo y rasgos delicados. Siempre pensé que se parecía a esa actriz de los noventa... ¿cómo mierda se llama? —Mientras intentaba recordar volvió a tomar de su trago— ¡Ah, ya sé! ¡Marisa Mondino! ¿La ubicás? —le preguntó ella tocándole la mano.

   Sí, ya sé de quién hablás. Sí, puede ser, tiene un aire. Pero igual me resulta desagradable, por dentro y por fuera. Lo quiso cagar a mi hermano conmigo, ¿entendés? ¡Lo que vos sospechaste aquella vez era cierto, Polaco! Y yo que te cagué a pedos. Cuando pasó lo de mi cuñada me sentí para la mierda con vos, aunque hacía seis años que vos y yo nos habíamos separado y bueno, debía decírtelo. ¡Perdón!

   Jajajaja... me das ternura. Eso ya pasó. Acepto tus disculpas pero ya fue. La mina nunca me cayó bien y bueno, ahora que me contás que mi olfato no falló se confirma que ya era una hija de puta antes, pero ya está, ¡ya pasó! —le dijo y le dio un beso tierno en los labios con una sonrisa dulce en toda la cara. Él se sonrió pero con un visible malestar por recordar el incidente familiar que no terminó de contarle.

   Hablando de parecidos, ¿sabés que actor siempre me resultó idéntico a vos? No te me cagues de risa pero de verdad que son iguales... —dijo ella risueña para cambiarle el humor a él.

   ¿Actor parecido a mí? —preguntó él ingenuo. —No, la verdad que no me imagino quién puede ser...

   ¿Lo ubicás a Clive Owen? El de "Los niños del hombre"...

   Jajajaja... —lanzó una carcajada inesperada— ¡me estás cargando! Ese tipo es hermoso y yo soy un sapo ¡al lado de ese!

   Bueno, lo de "tipo hermoso" me sonó algo "gay"... —dijo simpática para incomodarlo — pero todo bien, mientras me sigas atendiendo así, no tengo dramas yo.

   A mí no me apures, eh. —dijo y la abrazó fuertemente. La comenzó a besar despacio desde la comisura hasta abrirle la boca y meterle la lengua caliente lentamente. Se besaron un rato largo en silencio y volvieron a quedarse abrazados callados hasta que ella dijo: —Habla muy bien de vos que me hayas dicho cuánto lamentabas no haberme creído lo de mis sospechas sobre tu cuñada. Me sorprendiste gratamente... Sos mejor persona de lo que recordaba.

   Cambié mucho, Polaco. Los dos cambiamos mucho. Me alegro tanto haberte ido a buscar. ¡No sabés cuánto!
Dejaron sus vasos sobre una de las mesitas de luz y volvieron a amarse una vez más.



Marco Mahler - Recycling Art - Tom Samui

Marco Mahler - Recycling Art - Tom Samui